Para este trabajo he
seleccionado el proyecto, que aparecen en el blog de “Aventura diminuta”, de El
Supermercado. Justifico la elección de dicho proyecto, y relacionándolo con el
tratamiento de la salud puesto que trata dos aspectos fundamentales en la
salud, como son la nutrición y la educación ambiental.
Trata la nutrición, ya
que uno de los objetivos es conocer los distintos tipos de alimentos sanos, así
como aprender a combinarlos, saber
diferenciarlos de los poco sanos, y por último conocer sus efectos en la salud.
El aspecto de la
educación ambiental lo aborda desde el tratamiento del reciclaje, la
reutilización de materiales y la generación de residuos, así como el impacto
que ello genera.
El proyecto, comienza
como habitualmente se comienza un proyecto, que es preguntando al alumnado a
cerca de sus conocimientos previos. Se le pregunta que conocen de los
supermercados, si saben como funcionan, si han ido alguna vez, a los distintos
tipos de supermercado que han ido… Es donde se ven aspectos a trabajar, como
puede ser la coeducación (muchos niños y niñas indican que solo van a comprar
las mamás) o lo que surja. Y en entonces cuando se plantea hacer un
supermercado.
Para ello, lo primero es
elegir un nombre, se hacen propuestas, se debaten, y se votan. Una vez escogen
el nombre, se hace un cartel con el nombre y un eslogan divertido. Es una forma
más de involucrar al alumnado y darle voz y voto.
A continuación llega el
momento de trabajar en casa, ya que se deben recoger envoltorios, bricks,
latas, botes… de productos de supermercado. En casa, los deben limpiar bien y
explicarle a sus hijos para que sirven. Una vez en clase, montamos nuestro
rincón de supermercado, lo organizamos y clasificamos. También se trabajan
aspectos como las texturas, formas, olores, etc, que pueden ser válidos para
ordenarlos. También se observan las etiquetas que traen y se pueden crear
otras, en función de aspectos que se vean, hago aquí mi aportación y apunto a
la posibilidad de hacerlo por colores indicando el impacto ambiental de cada
producto.
Entre otras actividades,
se trabaja relacionado todo ello con el cuento “El tren de la buena salud”, que
ayudará a los niños y niñas a comprender aspectos básicos de los grupos de
alimentos, y como actividad final en ello, la realización de menús, incluyendo
alimentos de los 4 grandes grupos de alimentos.
Posteriormente a todo
ello, se hace una salida al supermercado más próximo. Pero todo ello se vinculó
a un taller de cocina, para darle aún mayor sentido, elaborando una merienda
sana, y diseñando un menú, a partir de todo lo que habían aprendido hasta el
momento. Pero para todo ello se hicieron cuentas, de todo lo que se necesitaba;
en la salida las familias acompañaron, y se hicieron cargo de cada grupo de
alumnos, que tenían que comprar determinado producto. De esta forma el alumnado
de educación infantil, pudo ver todo lo trabajado, ver la distribución de
productos, los trabajadores, el ticket, la vuelta (de dinero).
Posteriormente se elabora
el menú en el aula, y se discuten las dudas que le surgen a muchos niños y
niñas en el proceso de compra.
Por último, el rincón del
aula que queda como supermercado no debe quedar como un simple rincón de juego,
ya que todas las cosas allí acumuladas se pueden convertir en juguetes con
otros fines de juego, con lo cual se les debe orientar para que reproduzcan lo
ya trabajado y vivenciado.
También se pueden
contemplar otras posibilidades en el proyecto, como la publicidad, procedencia
de los productos, peso de los productos…y un largo sinfín de contenidos a
trabajar.
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